Hay fiscales que tienen hasta Bs 2,3 millones de patrimonio
Entre las nuevas autoridades departamentales hay una que declaró 15 bolivianos; William Alave, fiscal de La Paz, tiene deudas.
Los nueve fiscales departamentales en el juramento a su cargo, el pasado martes en Sucre. ABI.
Entre los nuevos fiscales departamentales que fueron posesionados el martes hay quienes tienen hasta 2,3 millones de bolivianos de patrimonio. Una de ellas sólo alcanza a los 15 bolivianos, según datos de la Contraloría General del Estado.
El fiscal departamental de Cochabamba, Laslo Vargas Vilte, declaró 2.369.793 bolivianos de patrimonio neto, muy por encima de sus colegas e incluso que el mismo fiscal general, Juan Lanchipa, que declaró 9.700 bolivianos.
La diputada Susana Rivero (MAS) manifestó que es un “imperativo” la investigación de fortunas de los nuevos fiscales designados por la máxima autoridad del Ministerio Público y de aquellos que todavía quedan de la gestión de Ramiro Guerrero.
El fiscal que sigue a Vargas es Mirael Salguero Palma, de la Fiscalía de Santa Cruz, quien tiene 1.984.500 bolivianos.
Asimismo, Juan Carlos Cuéllar Zurita, el fiscal designado a Pando declaró a la Contraloría 810.955 bolivianos de patrimonio neto. Gisela Gonzáles Romero, fiscal departamental de Beni cuenta con 603.182 bolivianos.
Los tres que le siguen son: Álvaro Nava Morales, posesionado como fiscal departamental de Chuquisaca, quien declaró 489.273 bolivianos de patrimonio; Aimore Álvarez Barba, el nuevo fiscal de Tarija tiene 357.584 bolivianos; y Orlando Zapata Sánchez, el fiscal departamental de Oruro cuenta con 330.500 bolivianos de patrimo.nio.
La flamante fiscal departamental de Potosí, Roxana Choque Gutiérrez, declaró 15 bolivianos de patrimonio.
Finalmente, a diferencia de sus ocho colegas, el fiscal departamental de La Paz, William Alave, declaró más deudas que patrimonio. Pues sus bienes alcanzan a 664 mil bolivianos, mientras que sus deudas ascienden a 1.106.197, por lo que su patrimonio es de -442.197 bolivianos.
La legisladora Rivero escribió en su cuenta de Twitter varios mensajes referidos al rol que debieran cumplir los fiscales, luego que fueran posesionados este martes por el nuevo Fiscal General del Estado.
“¿Qué harán con rezago de carga procesal atorada en etapa de investigación / preparatoria? ¿Harán gestiones para que el IDIF / ITCUP estén en departamentos? ¿Cómo podrían investigar sin instancias técnicas? Y un imperativo: pidan investigación de fortunas a fiscales de sus distritos, de pronto les aparecen bienes”, cuestionó.
La información fue ampliada a ANF, Rivero dijo que se refiere a los nuevos fiscales y a los que quedan de la anterior gestión, toda vez que sólo se hizo un cambio en las cabezas, es decir de los fiscales departamentales.
Asimismo, Rivero lanzó una serie de preguntas para los fiscales: ¿Por qué sus estadísticas tienen más casos que (los) reportados en juzgados por el Consejo de Magistratura? ¿Hay investigaciones sin control jurisdiccional, acaso? Luego de inventariar casos, ¿cómo se organizarán por etapas procesales, por materias, por complejidad?”.
No obstante, pidió a los fiscales que pongan sus ojos en los casos de violencia. “Todos los delitos son conductas reprochables, pero, ¿qué posición institucional adoptarán ante las violencias infames? Ya no soportamos noticias de violaciones de menores o mujeres conciliadas. No pregunto aún de detenidos preventivos porque pronto habrá abreviación procesal”, escribió.
Lanchipa tomó juramento de los nueve fiscales departamentales en la ciudad de Sucre. “La tarea asignada a los fiscales departamentales está orientada principalmente en dos grandes desafíos, (es decir) recuperar la confianza de la población en el Ministerio Público”, les pidió.
La primera autoridad del Ministerio Público afirmó que no permitirá ningún acto de corrupción de los fiscales departamentales ni de materia, que no tendrá ningún problema en despedirlos si se comprueba hechos ilegales. Su antecesor, Ramiro Guerrero, tenía el mismo objetivo, sin embargo, muchos funcionarios se mancharon por la corrupción.
Fuente: Página Siete