La planta de papa de Incahuasi se pudo adjudicar por menos dinero

El Gobierno central adjudicó a una empresa tarijeña la construcción de una planta procesadora de papa en el municipio de Incahuasi por la suma de Bs 127,9 millones, que equivalen a $us 18,4 millones. Pero, ¿puede costar tanto un complejo industrial de este tipo?.

Imágenes de la maqueta y construcción de la planta industrial de Papa en Incahuasi. Fotos: Redes Sociales

Incahuasi es una localidad ubicada en la provincia Nor Cinti, al sureste del departamento de Chuquisaca, y está a 412 kilómetros de Sucre por carretera.

Allí, sobre una explanada de tierra, se muestran imponentes dos letreros gigantes: uno lleva la fotografía del presidente Luis Arce y el slogan “Reconstruyendo nuestra Patria, sembrando esperanza”; el otro, contiene un resumen técnico del proyecto.



En ellos se ven también las inscripciones del Ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural y de su brazo operativo para esta obra, la Empresa de Apoyo a la Producción de Alimentos (Emapa), que fue la encargada del proceso de adjudicación del millonario proyecto.

Este complejo industrial de $us 18,4 millones producirá puré de papa, papas tipo Pringles, papa prefrita precongelada y almidón con alta calidad e inocuidad.

En el letrero puesto en el lugar de la obra se observa que el monto de inversión asciende a Bs 127.928.149 ($us 18.446.727), pero el domingo 7 de mayo el ministro de Desarrollo Productivo, Néstor Huanca, dijo en una entrevista con Bolivia Tv que el complejo industrial demandará Bs 161,8 millones, es decir, $us 23,3 millones.

La orden de proceder se dio el 2 de febrero de 2023 y su plazo de construcción es de 500 días calendario.

La nueva industria tendrá capacidad para procesar alrededor de 5 toneladas por hora de papa prefrita congelada, además de puré, almidón y hojuela del tubérculo, según detalló Huanca.

Adjudicación y la empresa.

El 25 de julio de 2022 se autoriza el proceso de contratación de la empresa ejecutora con un presupuesto de Bs 125.549.433, pero, tras dos convocatorias internacionales declaradas desiertas, Emapa obtiene vía libre para iniciar una contratación por excepción, es decir, por invitación directa.

El 21 de diciembre de 2022 la Comisión de Calificación del proceso de contratación bajo la modalidad de excepción del proyecto recomienda adjudicar a la empresa Liroso por un monto de Bs 122.714.321,86, y un plazo de 500 días calendario, “ya que cumple con los aspectos: administrativos y técnico, establecidos en los términos de referencia de la presente convocatoria”. Esta comisión estuvo conformada por los funcionarios Fernando Jesús Villegas Inchausti, responsable de Obras Civiles; Elisa Celia Sarzuri Pari, técnico industrial UPP; Lucio Apaza Marca, técnico industrial; y Franz Alejandro Coila Ochoa, jefe de Unidad de Cartera.

Así, Liroso recibió la invitación con la recomendación de que “ejecute un óptimo funcionamiento operativo que requiere de la construcción de infraestructura civil, instalación de maquinaria y equipos de última tecnología”.


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El contrato fue firmado por Franklin Flores, en su condición de titular de Emapa, y por Adriana Soruco Pastrana, representante legal de Liroso.

Esta empresa, con sede en Tarija, ofrece servicios de venta y alquiler de equipos pesados, diseño y construcción en general, consultoría y capacitación ambiental y cálculo estructura, según su página de Facebook creada el 31 de diciembre de 2018, donde tiene 112 seguidores y una escasa interacción.

No cuenta con una página web y tampoco está disponible información sobre su experiencia en la construcción de complejos industriales.

Pudo haber costado un tercio menos de lo adjudicado.

CORREO DEL SUR consultó con una empresa de amplia trayectoria en el rubro industrial cuánto podría costar una planta procesadora de papa en el municipio de Incahuasi y la respuesta fue sorprendente: Bs 42 millones, es decir, $us 6 millones, un tercio de lo que pagará el Gobierno.

Aquí, algunos datos que sustentan esa cifra comparada con lo que se invierte con recursos provenientes del Tesoro General del Estado (TGE).

La planta está compuesta por obras civiles, equipamiento, montaje, instalación de servicios y puesta en marcha.

Las obras civiles por el tipo de construcción, que son galpones, no deberían costar más de 2,5 millones de dólares.

El equipamiento, de procedencia china, aunque es acero inoxidable la mayoría, se ha estimado en 1,5 millones de dólares.

Los servicios básicos, considerando provisión de agua potable, energía eléctrica, alcantarillado, comunicaciones y otros no debería pasar de 0,3 millones de dólares considerando que queda en un “sitio aislado”.



El montaje no debería exceder del 20% de la inversión del equipamiento, o sea 0,3 millones de dólares, y la puesta en marcha tendría que demandar no más de 0,2 millones de dólares.

Por lo tanto, considerando que es una obra fuera del radio urbano, con todos los problemas que eso implica, “se podría aceptar” un sobreprecio del 10%; es decir que el total de la inversión no es más de 6 millones de dólares, o sea 42 millones de bolivianos.

El Alto.

El Gobierno central, a través de Emapa, ejecuta una planta de papa similar en la ciudad de El Alto, con una inversión de Bs 162 millones. Este complejo, que procesará alrededor de 6.000 toneladas de papa al año, entrará en etapa de pruebas a fin de año.

Fuente: Correo del Sur

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